La revista Huétor Vega Gráfico sale adelante cada año gracias a la colaboración desinteresada de cada una de las personas que deciden enviar sus trabajos para ser publicados.
Tanto los premios del Certamen de Relato Corto que la propia Asociación promueve como la impresión de la revista es posible gracias a la participación de las empresas anunciantes, así como del Ayuntamiento de Huétor Vega.
El colectivo Huétor Vega Gráfico realiza una serie de reuniones a lo largo del año para coordinar la redacción y publicación de la revista.
Se podrían escribir varios libros sobre el exilio de hueteños a Alemania. Fueron muchas las decenas de familias que emprendieron la marcha, a mediados del siglo pasado, en busca de salario a la gran industria germana. En ese contexto gris, en esa España cruda, en ese añorar las raíces, nació la asociación cultural Huétor Vega Gráfico, que vino al mundo en forma de revista en julio de 1972. ¿Los padres del invento? Cirilio Jiménez y Francisco Pérez-Rejón Sola –cronista oficial del pueblo aún hoy–, que parieron la criatura con pocos medios y mucha ilusión a la vuelta a su localidad natal.
La revista nació con la filosofía de recoger la creatividad de los vecinos aficionados a las letras y a las artes. Se trata, pues, de la primera documentación de los brotes de cultura libre y silvestre. No muy lejos de los fanzines autoeditados que avivaron el punk en el Londres del 77. «Desde entonces, dibujan la vida sociocultural local. Daban testimonio directo de la historia inmediata del municipio a través de artículos de opinión, culturales y deportivos, así como de los usos y costumbres del pueblo. Y sin olvidar el objetivo de su primera edición: ofrecer la posibilidad a todas aquellas personas con inquietudes literarias un espacio de expresión donde manifestarse, abierto también a la poesía», detalla Carolina Higueras, actual presidenta del colectivo, que cuenta con un equipo formado por el secretario Miguel Ángel Cañaveral, el tesorero Manuel Ruiz Vílchez, el tesorero adjunto José Luis Iglesias y los redactores Jesús García, José Moreno, Ángel Moreno, Charo Tovar y José Amador.
La sede de la asociación estuvo en Huerta Cercada, pero se mudó a la peña amiga El Albondigón por unas reformas en el edificio, «hasta que el Ayuntamiento nos ceda un espacio nuevo», añade Higueras, portavoz a su vez del grupo municipal del PSOE en la corporación. Huétor Vega Gráfico ha editado en 2016 el número 45 de la revista, en la que siguen participando socios fundadores, «que la ven crecer con el vértigo de cumplir un año más». «Recogiendo las palabras de Charo Tovar, la redactora casi oficial de la editorial, sentimos que la sola consideración de todas las personas que han transitado por sus páginas, aquellos y aquellas que la hicieron posible desde su concepción, superando tantos momentos de crisis que amenazaron su pervivencia, da coherencia a la sensación de que ha pasado un mundo por su existencia», comenta Carolina.
Casi medio siglo
Los números infunden respeto: 45 años y cientos de colaboradores. Algunos ilustres en las letras granadinas, como Ladrón de Guevara o Elena Martín Vivaldi. «Los asiduos colaboradores que año tras año aportan su visión del mundo y otros tantos que se han ido incorporando, rejuveneciendo con sus puntos de vista los contenidos que se publican, además de la participación activa de colectivos y asociaciones», repasa la presidenta.
«El hecho de que una publicación local gratuita, de temática sociocultural, que se financia en un 70% de anuncios fundamentalmente, haya sobrevivido durante 45 años resulta cuanto menos sorprendente, y dice mucho de la voluntad de un grupo de personas que han puesto su fe, su compromiso y su esfuerzo por mantenerla viva», reflexiona Higueras, orgullosa de que no han faltado anunciantes ni en los peores picos de la crisis.
Para este longevo colectivo, Huétor Vega Gráfico es mucho más que una mera revista anual. Fueron impulsores del certamen de pintura Rafael Guerra, que atrajo a notables artistas, cuyas obras ganadoras pasaban a la tutela del Ayuntamiento y se exponían en espacios como el Carmen de San Rafael o Huerta Cercada. Fruto de aquellos tiempos, las dependencias del consistorio lucen una colección de óleos y acuarelas que plasman rincones y personajes locales. Hoy, la artífice de las portadas es Emilio Peregrina, que cada año pone la lupa en un escenario hueteño. Del mismo modo, la asociación ideó el todavía vigente certamen de relato corto, muy seguido a nivel nacional.
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